miércoles, 31 de octubre de 2007

ella.

Aveces pienso que es exagerada su reacción, aveces pienso que se justifica su hipersensibilidad, aveces me agota y otras me llama la antención...
Si no le aviso de mi llegada ella grita despesperadamente, como si fuese a destriparla o como si le faltara el respeto a su presencia...

Si le aviso de mi visita asume en silencio mi compañia y nos desplazamos juntas en serenidad haciendonos compañia.

Cuando grita yo escucho, acudo a su llamado, infiero su malestar y espero a que calle porque sé que con una pequeña intervención el silencio nos acoge, porque es su ritual, porque es su defensa, porque yo lo quise así, porque asi es la alarma del auto.

jajajaja.

Paz

martes, 2 de octubre de 2007

29.9.1983

Me he desconectado de todo lo cibernetico para encontarme con seres queridos bajo el alero de mi cumpleaños Nº24 y el quinto aniversario de pololeo.
Importantes reencuentros, grandes celebraciones, catarsis varias y RELFEXIONES PERSONALES QUE PROCEDO A COMPARTIR.

Ha sido un año, digamos, redondo, donde he logrado experimentar el dolor de evocar recuerdos no gratos, sentir su amargo sabor y envolverme de su mala energía para resignificarlos como antes no lo hice y así convertirlos en una experiencia vital que proporciona verdadera sabiduría, de esa que no entregan los libros ni maestros, de esa que se aprende a costalazos.
En términos educacionales estoy a ex portas
de finalizar mi carrera, con grandes logros e infinitos aprendizajes, he reafirmado mi gusto por la psicología forense y he desarrollado habilidades que me permiten trabajar en el área, me he enfrentado a una realidad que choca, que a ratos duele, que genera impotencia, pero que finalmente transformo en motivación por hacer mi trabajo con ahinco y compromiso para entregarle a los reos lo mejor de mi.
Me he aceptado a mi misma con mis defectos y virtudes y por sobre todo he aprendido a querer mis defectos, me he enamorado de mi misma, nunca narcisamente, pero si de manera tal que no necesite reafirmaciones externas (que nunca vienen mal).
He consolidado una relación afectiva significativa, construida a base de amor y verdad, con altos y bajos, como cualquiera, sin embargo, aprendo día a día que la más minima crisis es un grito del cambio que quiere adentrarse en nosotros.
He reconstruido
la relación con mi madre, dándole permiso al dialogo, al entendimiento, a la catarsis y a la incondicionalidad.
He delineado mi futuro con sutileza, sin tener expectativas sobredimencionadas en él, pero creyendo que hoy doy pasos importantes para edificalo.
He crecido mucho más de lo que imaginé, me he desnunado de las defensas psíquicas arcaicas que me protegían con un afán hedonista.
Me he animado a ser dura cuando tengo que serlo, a ser blanda cuando se amerita y a ser parcial cuando se debe, he creido en mi misma y me he animado a escribir.
He aceptado mi pasado doloroso como un tesoro personal, que puedo compartir como experiencia de vida, entiendiendo que el silencio no amina el daño.

He crecido en un año redondito y por eso estoy en paz conmigo misma y con quienes me rodean.

Pero lo más importante de todo es que me he encontrado, frente al espejo, con una mujer un poco loca pero feliz.